El Mercado Único Digital pretende eliminar barreras para la adquisición transfronteriza de bienes y servicios online de los países miembros. Con un volumen de 500 millones de consumidores (en reemplazo de los 28 mercados nacionales) este mercado permitirá a Europa ser más competitiva en el mercado tecnológico mundial.
Este último trimestre de 2015 va a ser decisivo para el proyecto, después de que el pasado mes de junio se alcanzara un acuerdo sobre el nuevo reglamento de protección de datos personales de la Unión Europea, que seguramente sea aprobado antes de que acabe el año. La nueva ley de protección de datos, que será dirigida por una autoridad única, se aplicará por igual a las empresas europeas e internacionales en todos los territorios comunitarios.
La estrategia de implantación de este mercado único pretende mejorar el acceso de los consumidores y las empresas a bienes y servicios digitales en Europa, establecer unas condiciones adecuadas y unas reglas equitativas para favorecer el crecimiento de redes digitales y servicios innovadores y maximizar el potencial de crecimiento de la economía
España facilitó su visión del proyecto en enero de 2015 mediante sendas cartas del Ministro de Industria, Energía y Turismo, al Vicepresidente del Mercado Único Digital y al Comisario de La Economía y Sociedad Digital.
Una de las cuestiones básicas para España para la puesta en marcha de este proyecto es la revisión del marco regulador de las comunicaciones electrónicas ya que, aunque la legislación existente ha permitido un mercado dinámico y muy competitivo, se ha quedado atrás en cuanto a la modernización de sus redes de telecomunicaciones. Las inversiones en infraestructuras, fundamentalmente de los operadores de telecomunicaciones, es un punto clave para garantizar la sostenibilidad digital y para poner a disposición de los mercados un terreno de juego equilibrado que garantice la protección a consumidores y usuarios.
Para las empresas españolas, el mercado único digital va a abrir un gran campo de oportunidades de negocio. Contar con un asesor experto, además de ayudar a detectar nuevas oportunidades y riesgos en el proceso de internacionalización, puede ayudar a la organización a cumplir con todos los requisitos necesarios a nivel jurídico y fiscal para entrar en el juego con las mismas oportunidades que el resto de competidores. AYCE Consultores cuenta con un equipo de profesionales con más de treinta años de experiencia, que hará más sencilla la elaboración de un plan estratégico para la expansión internacional de su empresa.
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