La contabilidad o facturación multidivisa se eleva como una necesidad para numerosas empresas que deben hacer frente a diversos cobros y pagos en diferentes países, ya que al salir de la zona Euro se obliga a las compañías a adaptarse a las divisas de cada estado.

La globalización se ha integrado en todo el mundo. El comercio y las finanzas ya no son lo que eran hace algunas décadas, ya que la inmediatez en los transportes y las ventajas del desarrollo tecnológico han favorecido la aparición de miles de pymes y grandes empresas que realizan acciones comerciales en diferentes países.

Facturación en otra moneda: Guía para Llevarla a Buen Término

Las importaciones y exportaciones son una de las principales tareas de las empresas españolas en la actualidad.

Por ello, es vital conocer a la perfección el mercado y los requerimientos necesarios para operar de acuerdo a la legislación vigente en cada país, en especial en la zona en la que se tributa.

Al vender un producto en un país en el que la moneda es diferente, hay que acordar la divisa en la que se va a realizar la transacción, aunque lo más normal es que la transacción se realice con la moneda del comprador.

Eso sí, sea como sea, hay que tener en cuenta que los tipos de cambio varían todos los días, por lo que es importante llevar un correcto registro de los libros de cuentas para estar al tanto de los gastos e ingresos, en especial si se va a facturar en moneda extranjera.

El comercio exterior genera en muchos casos notables ingresos para las empresas, especialmente en sectores relacionados con la tecnología o emergentes. Por ello, y aunque se realice la facturación en otra moneda, hay que tener en cuenta siempre la legislación del país en el que se pagan impuestos, ya que suelen ocasionar problemas los errores al cambiar de divisas, ya que estos tipos de cambio son volátiles.

Esto quiere decir que, sin importar la divisa en la que se facturen los pedidos, los impuestos se deben pagar en la divisa del país en que se tributa.

Es necesario respetar los plazos y las cantidades de la facturación realizando la conversión a la moneda, como es el Euro en el caso de España.

Por lo tanto, para evitar problemas posteriores, las empresas suelen incluir en la factura el tipo de cambio del momento en que se realiza la transacción, con el fin de dejar la máxima constancia posible de la legalidad de la acción comercial.

Contabilidad Multidivisa en Empresas que Apuestan por el Comercio Exterior

Si la empresa tiene clientes en varios países con diferentes monedas, es necesario realizar este tipo de contabilidad. Para hacerlo correctamente, hay que tener en cuenta varias consideraciones.

Por una parte, se debe incluir la moneda en la que se llevó a cabo la transacción, así como el código ISO de la moneda, que se representa con tres letras. Por ejemplo, EUR corresponde al Euro, y USD al Dólar estadounidense.

Además, en la factura debe reflejarse el tipo de cambio establecido en el momento de la factura, basado en el que aparece en el Banco de España.

Es importante que el valor de las facturas sea correcto, para no tener problemas posteriores con la declaración anual de la renta.

Para hacer la tarea más sencilla, existen asesores profesionales en contabilidad y facturación multidivisa.

Cómo Hacer una Factura en Dólares

La facturación y contabilidad multidivisa implica una serie de complicaciones para la empresa, debido a la complejidad de las transacciones internacionales, así como el tipo de cambio fijado para cada momento.

Dentro de los tipos de divisa, el Dólar Estadounidense, la Libra Esterlina y el Euro son las más utilizadas internacionalmente.

Para hacer una factura en dólares se debe llevar a cabo el mismo procedimiento que si se tratase de cualquier otra divisa, por lo que es necesario anotar en la factura el tipo de cambio del momento.

Estas facturas suelen emitirse si el comprador del producto o mercancía reside en los Estados Unidos. Sin embargo, si la empresa exportadora reside y tributa en España, debe realizarse la conversión pertinente para adaptarse al pago de impuestos del país de origen.

Esto suele generar problemas, ya que en determinados estados la divisa tiene tan poca fuerza que a muchas empresas no les conviene facturar con clientes de dichos lugares, debido a la posterior carga impositiva, tanto en la aduana, como en la Agencia Tributaria de España.

Sin embargo, el dólar es una moneda con gran fuerza en el mercado internacional, ya que es la que se emplea para extraer el resto de tipos de cambio, además de ser una de las principales economías mundiales.

Por ello, son muchas las empresas españolas que exportan productos a Estados Unidos a través de una contabilidad o facturación multidivisa, ya que reporta grandes beneficios a muchas PYMES y grandes empresas en España.