Es cierto que son muchos los aspectos que se deben tener en cuenta al gestionar una empresa, como la selección de la razón social, la contratación de personal, la tecnología que se va a utilizar o la ubicación del establecimiento entre otras, pero sin duda la optimización del coste de impuestos debería ser una de las principales preocupaciones de todo empresario. Algo que se puede conseguir con una buena planificación fiscal.

Todo tipo de empresas, independientemente del sector al que pertenezcan o de su tamaño, están obligadas al pago de impuestos, que de no gestionarse correctamente, podrían afectar negativamente a la economía.

Son muchos los empresarios que recurren a la evasión y elusión de impuestos para tratar de ingresar menos dinero a las arcas fiscales y reducir la carga impositiva, pero esta no es la solución. Conscientes de ello, hoy os vamos a dar las claves para hacer una planificación fiscal que optimice el coste de impuestos de tu empresa. Toma nota.

¿En qué consiste la planificación fiscal de una empresa?

La planificación fiscal es una herramienta totalmente legal y permitida para optimizar el coste de impuestos de una empresa, a través de un proceso de toma de decisiones cuyo principal objetivo es minimizar el coste impositivo, dentro de los parámetros legales permitidos.

Dicho esto, a continuación os mostramos las claves a la hora de llevar a cabo una buena planificación fiscal que te ayude a reducir la carga tributaria de tu empresa.

Aspectos a tener en cuenta al llevar a cabo una planificación fiscal

Partiendo de la base de que no existe un manual que incluya el ABC para llevar a cabo una planificación fiscal exitosa, al desarrollar la estrategia que vamos a seguir, debe girar en torno a tres aspectos clave: anticipación, personalización y actualización.


Te interesa:

¿Sabes cuántos impuestos pagan las empresas en España?


Hay que tener en cuenta que cada empresa es diferente a otra y tiene sus propias características, por lo que al diseñar la estrategia hay que tener en cuenta la situación impositiva de  una empresa, atendiendo a aspectos como el tipo de negocio, la ubicación en la que se realizan las operaciones, etc.

Una de las primeras decisiones que se deberá tomar es si la empresa tributará el pago fraccionado del impuesto de sociedadees por la opción A o B

Aunque el importe final será el mismo independientemente del método escogido, podría haber una importante diferencia en el importe a anticipar.

¿Cuándo iniciar la estrategia de planificación fiscal?

La estrategia de planificación fiscal debería comenzar en el momento en el que una empresa inicia su actividad. Hay que tener en cuenta que al constituir una sociedad existen diferentes decisiones que podrían afectar a la tributación de manera considerable.

Asimismo, la planificación fiscal debe adaptarse al paso del tiempo, ya que no hay que olvidar que se trata de una actividad de todo el año. De esta forma se podrá estar al tanto de posibles modificaciones de leyes o nuevas ventajas fiscales que podrían afectar a la carga tributaria de una empresa.

Documentación

La documentación que se disponga será clave para realizar un correcto análisis y cálculo de impuestos que permita llevar a cabo una buena planificación fiscal. Para ello, y en plena era digital, es indispensable contar con un soporte adecuado y de automatización que ayude a mantener perfectamente organizada toda la información necesaria.

Confiar en la memoria de uno mismo es un error, ya que podría poner en riesgo la recuperación y la seguridad del almacenamiento de la documentación de una empresa. En ese caso, además podríamos tener problemas con la Agencia Tributaria.

Reporte de ingresos

Hay que evitar cualquier tipo de descuido, la falta de diligencia o aquellos errores que pudieran afectar al reporte de ingresos, ya que de lo contrario se correría el riesgo de que estas acciones fueran consideradas como un intento de evasión fiscal. Algo que acarrearía graves consecuencias para la empresa.

Si se cometiese algún error involuntario relacionado con el reporte de ingresos, lo más recomendable sería presentar una declaración complementaria  rectificativa lo antes posible para evitar las multas y/o sanciones correspondientes.

Maximizar las deducciones personales

La ley establece una serie de posibilidades de deducción relativas a impuestos estatales y locales, intereses hipotecarios, donaciones caritativas, impuestos a la propiedad, y otros gastos que deben tenerse en cuenta al llevar una buena planificación fiscal.

Esto hace que sea importante conocer y mantenerse actualizado ante las leyes vigentes, ya que de esta manera se tendrán mayores posibilidades de acogerse a posibles deducciones, y así reducir el pago de impuestos.

Conclusión

Una buena planificación fiscal ayudará a las empresas a reducir su carga tributaria, siempre dentro de la legalidad. Si tienes dudas al respecto o quieres asegurarte de tener todos los aspectos que afectan a dicha planificación, puedes contactar con el equipo de asesores fiscales de AYCE Laborytax. Con ellos, tus impuestos estarán en las mejores manos.