Sabemos que por desgracia esta es una situación muy habitual, que genera una gran preocupación y múltiples quebraderos de cabeza, por ello desde AYCE Laborytax vamos a contarte cómo reclamar deudas a clientes morosos que no pagan de la forma correcta.

Pasos para reclamar deudas a clientes de tu empresa

Uno de los mayores temores de tu empresa es la morosidad, que puede poner en peligro la rentabilidad y la viabilidad si no se soluciona rápidamente y se alarga en el tiempo.

El problema es que existe un gran desconocimiento sobre cómo reclamar deudas a clientes morosos, ya que esta es una situación que todos queremos evitar, lo que hace que cuando sufrimos algún problema de morosidad, no sabemos cómo actuar.

Pero la realidad es que la morosidad afecta al 90% de las empresas españolas de un modo u otro, generando unas pérdidas de ingresos del 17% aproximadamente.

Por todo ello, ya sea para prevenir o para poner solución a tu problema, a continuación vamos a ver cómo reclamar deudas en tu empresa a clientes que no pagan paso a paso.

Sé constante

Lo primero y más importante es ser constante y no dejar pasar la deuda, insistiendo en que te paguen una y otra vez. Que no te de vergüenza, es tu dinero y te pertenece.

La constancia e insistencia es fundamental, ya que dejar pasar la deuda juega a favor del moroso. Ten en cuenta que si no paga probablemente sea porque no puede, no porque no quiera, por lo que en caso de no cobrar la deuda rápidamente, corres el riesgo de que la empresa se declare insolvente o acabe desapareciendo, lo que complicaría todavía más el cobro de la deuda.

Contacta vía telefónica

Una vez el cliente ha superado el plazo para el pago y no ha contactado con tu empresa, contacta con él vía telefónica para recordarle que tiene una deuda pendiente. Aquí es importante hablar con naturalidad y educación, ya que de esta forma tendrás más posibilidades de que el moroso reconozca su deuda, y este es el primer paso.

Por nuestra experiencia, te recomendamos no ofender al deudor ni ser muy agresivo, ya que en ese caso corres el riesgo de que no reconozca la deuda, lo que complicaría su cobro.

Redacta una carta de reclamación amistosa de deuda

Si la vía telefónica no ha servido, el siguiente paso sería redactar una carta de reclamación amistosa de deuda, ya que de este modo quedará constancia de la deuda por escrito.

Nuestro consejo es redactar una carta amistosa de forma clara, correcta y bien intencionada,  en la que expongas los hechos, indicando que existe un retraso en el pago y trasladándole el deseo de que el impago sea satisfecho cuanto antes.

Aquí es importante que identifiques el tipo y el importe de la deuda para que no haya dudas. Si es posible, acompaña la carta de documentación.

Para evitar ser demasiado agresivos y que el moroso se lo tome como una amenaza, lo mejor es enviar la carta de reclamación de deuda por correo ordinario a la dirección de la empresa o domicilio del deudor y también por correo electrónico. Recuerda que es una reclamación amistosa.

Redactar un burofax para reclamar deudas

Si llegados a este punto sigues sin cobrar la deuda, lo siguiente sería redactar un burofax para reclamar la deuda. El burofax servirá como prueba fehaciente de que el moroso es consciente y ha sido informado del impago.

Dado que ya has agotado la vía amistosa, ahora sí puedes utilizar un estilo agresivo y exigente. Hay que tratar de impresionar al deudor, y una buena idea podría ser dejar la redacción del burofax en manos de un abogado.

Para que el deudor se sienta amenazado, hay que establecer un plazo para el pago de la deuda desde la recepción del burofax, indicando que si una vez superado el plazo no se ha pagado la deuda se iniciará la vía judicial.

Procede a la vía judicial

Si la vía amistosa y el burofax no han servido para reclamar las deudas, es el momento de proceder a la vía judicial e iniciar el procedimiento judicial monitorio.

El procedimiento judicial monitorio es una forma de resolución rápida y eficaz para reclamar deudas, y es el método al que más se acogen las empresas para cobrar impagos. Un procedimiento creado en el año 2000 que está recogido en la Ley de Enjuiciamiento Civil.

El monitorio puede ser solicitado por cualquier persona física o jurídica, siendo indispensable presentar pruebas que demuestren la existencia de deuda, por ello es fundamental que tengas toda la deuda perfectamente documentada.

Asimismo, la deuda no podrá superar los 250.000 euros. Para este paso no es necesaria la contratación de un abogado, aunque sí recomendable.

Cuando el juez admita la petición, se requerirá al deudor para que se oponga o pague la deuda:

  • Si se opone se procederá a un juicio verbal u ordinario, lo que ralentizará considerablemente el cobro de la deuda. Si la deuda no supera los 6.000 euros será juicio verbal, y si en cambio es mayor será un juicio ordinario.
  • Si no se opone, pero tampoco paga, se reconocerá la cantidad adeudada, y será necesario interponer una demanda ejecutiva, interesando la ejecución y el embargo de bienes del deudor.

Estos son todos los pasos para reclamar deudas a clientes morosos que no pagan. Nuestro consejo es comenzar por la vía amistosa, aunque esta es opcional, y en caso de no obtener solución, proceder a la vía judicial.

Si en tu empresa tienes clientes morosos y no sabes cómo reclamar deudas, los asesores jurídicos de AYCE Laborytax están a tu disposición para ayudarte, asesorarte, informarte sobre cómo proceder y resolver cualquier duda que tengas. Contacta con nosotros sin compromiso.